Joan Manuel Serrat y un memorable concierto en Ojo de Agua

• Trovador reunió a 5.000 personas 

Luis Eduardo Sánchez Quesada 

redaccion@periodicoelguacho,com 

En una noche de verano espectacular del mes de marzo de 2007, año en el que nuestro cantón cumplía 100 años, el reconocido trovador Joan Manuel Serrat dió un concierto para 5000 asistentes en el anfiteatro del Balneario Ojo de Agua. Sin lugar a dudas, gran parte del público eran belemitas que aprovecharon la cercanía para ir a escuchar a uno de los artistas más importantes del habla hispana. 

En aquella oportunidad, Serrat tenía fechas ya agotadas en teatros capitalinos, pero por petición del propio artista, él quería cantar a precios más populares y en un sitio abierto donde hubiera contacto y cercanía con la naturaleza y el público, por lo que el Ojo de Agua fue el lugar ideal. 

“Sino me falla la memoria la entrada costaba unos 10.000 colones, prácticamente un regalo para ir a escuchar a un artista de tal magnitud. Siempre he sido fan de él y escucharlo en el Ojo fue un lujo. La gente estaba sentada en mantas, en el zacate y hasta de pie, había una vibra lindísima. Pese a que pasan los años aún recuerdo aquella maravillosa velada, lastimosamente, no tenía gran tecnología para haberlo grabado”, relató Marianela Rodríguez una de las tantas belemitas que asistieron a este maravilloso concierto. 

“La fila que había para ingresar era enorme y la gente estaba muy ilusionada con ver a Serrat que estaba literalmente a la vuelta de la esquina. El ambiente era muy familiar y el público tenía edades muy variadas”, comentó Aymará Vargas Velásquez, otra belemita que disfrutó de este concierto. 

Y empezó el concierto  

Joan Manuel subió a la tarima a eso de las 6:00 p.m. y saludó a los presentes: ¡Bienvenidos a este Ojo de Agua fantástico! Seguidamente, arrancó con dos de sus temas más conocidos: “Menos tu vientre” y “Mediterráneo”. Desde ese momento, el trovador conquistó a los asistentes, a quienes siguió deleitando con temas como “Penélope”, “No hago otra cosa que pensar en tí”, entre otras. 

El público cantó cada uno de los éxitos de Joan Manuel, pero en el momento en que el trovador mencionó los siguientes versos escritos por Antonio Machado: “Caminante no hay camino se hace camino al andar”, Ojo de Agua alcanzó el éxtasis. “Para mí Ojo de Agua se transformó en un espacio muy distinto a lo acostumbrado, en ese momento lo vi como un lugar para las artes. Tener esa memoria sensorial y emotiva fue muy especial para mí”, manifestó emocionada Aymará. 

Otro momento destacado para esta belemita fue cuando Joan Manuel cantó Lucía. “Recuerdo estar cerca de una mujer que le pedía que cantara Lucía, ya que decía que así se llamaba su hija y que esa canción era muy importante. Cuando escuché las primeras notas de esa canción fue mágico. Tantos años después y aún lo tengo presente”. 

A eso de las 8:00 p.m. Serrat se despidió de su público. “El concierto estuvo tan bueno que ni la naturaleza se lo quiso perder: hubo un atardecer espectacular y luna llena, más la música de Serrat, ¿qué más va a pedir uno?”, finalizó Marianela Rodríguez.