La muchacha de la linda sonrisa
Imagen con fines ilustrativos.
¡Ella es única, su sonrisa cautiva y encanta! Ella sonríe siempre. Su espíritu es muy feliz, un ser humano encantador, que tiene un espíritu diferente. Su actitud ante la vida es tan agradable que la convivencia con una persona así trae paz y armonía a los que la rodean.
Andrea es su nombre: amable, necesaria, dinámica, radiante, elocuente, amorosa y con un espíritu único, cautiva tanto su espíritu que inunda de paz cada lugar donde se encuentra.
Ha sido una luchadora, tenaz, disciplinada y constante, tanto en su vida personal como profesional, a punto de graduarse de Fisioterapeuta en los próximos días. Ha luchado por esa meta y ha logrado recoger los frutos de ese esfuerzo y perseverancia.
Ella, Andrea, siempre tiene una sonrisa en sus labios, sabe transmitir su alegría a los que la rodeamos. Su positivismo y su lucha por ver lo bueno en los demás nos ha enseñado a todos a que no debemos juzgar a priori, siempre rescata lo bueno de cualquier situación.
Hace algún tiempo en la Revista “Selecciones “existía o existe (desconozco) una Sección que se llama “La Risa Remedio Infalible”, inclusive, como es sabido, existen terapias donde le provocan a los pacientes a reírse para aliviar el estrés y la ansiedad. Dentro de algunas definiciones de la “risa” existe una se entiende como “risa afiliativa” que es la alegría vínculo social y de cooperación, es un signo de aceptación social. La alegría que provoca la risa, alivia el malestar y disipa el estrés.
Por ejemplo, reírse de un chiste es una forma de aliviar las preocupaciones, las penas y las tristezas.
Volviendo a Andrea. Qué agradable sería que muchas personas pudieran seguir estos ejemplos para llevar una vida más feliz. Estoy seguro que el buen Dios la ha dotado de esta virtud y yo, como Tío de Ella, me siento muy alegre y trato de copiar esta conducta tan extraordinaria de la “muchacha de la eterna sonrisa”.
