Elena Polster: De Rusia al Liceo de Belén
Michelangelo Grieco Agüero
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Si pertenecen a alguna generación de la década de los noventa y estudiaron en el Liceo de Belén, posiblemente recordarán a la profesora Elena o “la rusa”, enseñando en su clase de inglés escrito. Como lo hizo desde el 2002, fecha en la que fue nombrada en propiedad para la enseñanza del inglés en nuestro cantón.
Elena estudió Filología en la Universidad de Moscú, posteriormente Enseñanza de Inglés, primero Bachillerato y luego Maestría y, desde 1999, empezó a dar clases de inglés en Costa Rica. Gracias a su estudio de las lenguas, pudo aprender rápidamente el español; sin embargo, tuvo dificultades comprendiendo el “voseo” tico, ya que no se usa en la mayoría de países hispanohablantes.
De entre los profesores del Liceo, Elena destacaba por la infinita paciencia que manejaba para lidiar con grupos de estudiantes, especialmente aquellos inquietos grupos de sétimo grado y todas las artimañas que se inventaban para hacerle la vida imposible a esta profesora.
Elena recuerda su experiencia en el liceo entre risas y angustias; comenta que no podía voltearse a ver a la pizarra porque siempre le lanzaban toda clase de objetos y le jugaban bromas. Tuvo que diseñar estrategias para enfrentar la situación: papelógrafos en la pizarra, para tener los ojos fijos en los estudiantes y un rubro de disciplina en clase, en el desglose de la nota de inglés fueron sus armas en esa guerra de salón de clase.
Finalmente, pudo lidiar con las indomables secciones de sétimo, pasando por todo tipo de situaciones, hasta que la movieron a dar clases a estudiantes de noveno, más maduros y comprensivos. Explica Elena que sétimo es un año complicado y hay mucha deserción escolar en las secciones de este grado.
En términos cantonales, Belén siempre le pareció un cantón maravilloso. Explica que los rusos adoran el clima de Costa Rica, sobre todo a quienes no les apetece el frío ruso, también valoran la seguridad del país con respecto a los países vecinos. Elena menciona que quiso vivir en Belén, sin embargo encontraba los precios de alquiler exorbitantes para una casa adecuada a sus necesidades, entonces se pasó a vivir a Lagunilla de Heredia y terminó enamorándose de la Ciudad de las Flores.
De manera paralela a su labor de educadora, desde 2007 dirigió un periódico en ruso llamado “Gazeta rusa”, durante 10 años, sobre el acontecer en Costa Rica que posteriormente fue traducido en español para el público costarricense.
Ya retirada, ahora se dedica al tejido que siempre fue su pasión y dará un curso en el programa para adultos mayores de la Universidad Nacional sobre “el idioma ruso para los curiosos”. Más enfatizado en cultura e historia rusa que propiamente en la enseñanza estricta del idioma.
Sobre su origen, Elena nos cuenta que nació en Tarusa (Тару́са), una ciudad pequeña ubicada 130 km al sur de Moscú (Москва́), en el río Oká (Ока), que pertenece al distrito de Kaluga (Калуга). La casa de su infancia es ahora un museo histórico dedicado a su abuelo,Vassili Vataguine ¡uno de los más grandes artistas minimalistas de Rusia!
Sin duda, el paso de Elena por el cantón y su servicio realizado en el Liceo será recordado con cariño por sus estudiantes y la comunidad de Belén en general.