Cementerio se encuentra a un 95 % de su capacidad
Ulises Araya Chaves
ulises.araya@periodicoelguacho.com
Finalizada su construcción en 1878, el Cementerio Municipal de Belén es uno de los pocos patrimonios arquitectónicos de nuestro cantón que aún conserva su infraestructura original.
Se dice que antes de que existiera este campo santo, los belemitas de aquel entonces se veían obligados a llevar sus muertos hasta el Cementerio de Heredia, con todas las complicaciones que esta tarea implicaba.
Hoy, 140 años después, el Cementerio Municipal se encuentra en un 95% de su capacidad, según confirmó Lorena Vázquez Menlendez, administradora del lugar desde el 2005.
Pese a ello, Vázquez advirtió que no hay de qué preocuparse, puesto que ya el Municipio invirtió ₡ 200 millones en la compra de un terreno colindante, donde se encuentra el osario común.
En este sitio se depositan los restos de los difuntos más antiguos, cuyos descendientes dejaron de pagar el derecho para que estén en las bóvedas ordinarias; sin embargo, a esta otra etapa del Cementerio aún le toca una inversión más para que quede totalmente lista.
La administradora no adelantó a cuánto ascenderían estas próximas obras: “Para esta segunda etapa, está pendiente hacer el cálculo nuevo, de cuánto sería, por ejemplo, la construcción de unos 100 o 200 nichos. Hay que hacer el cálculo, pero sí es una proyección alta” afirmó.
El servicio de incineración: próximo proyecto del Cementerio Municipal
Pese a que Vázquez aseguró que esa segunda etapa permitirá extender su vida útil en 80 o 100 años más; también, se pretende contar con el servicio de incineración.
Vázquez afirmó que es necesario un cambio cultural que fomente en los belemitas el optar por ese servicio; ya que, en un futuro, será una problemática que no solo enfrentará Belén, sino los cementerios de todas partes.
“Ya no solo Belén, sino todos los cementerios de este país, deben empezar a contar con incinerador, porque no vamos a tener espacios en el futuro y tenemos que ir poco a poco cambiando esa cultura”, aseguró Vázquez.
Los costos de esta iniciativa rondarían los ₡150 millones, pero esto depende de la aprobación del Concejo Municipal. El monto incluiría tanto el incinerador como su edificio.
Modificaciones al reglamento del cementerio: tumbas más estandarizadas
En los últimos meses, varias familias belemitas se han quejado del impedimento para modificar o reconstruir las bóvedas o tumbas de sus seres queridos.
Sobre este tema, la administradora aseguró que las disposiciones relacionadas con la infraestructura fueron modificadas en la última actualización de reglamento publicado desde el viernes 17 de noviembre del 2017 en La Gaceta.
Los cambios más significativos vienen incluidos en el artículo 24 que dispone, por ejemplo, el color de las bóvedas, que solo pueden ser blancas, así como el tamaño, entre otras características.
Al consultar por qué no se permiten construir nuevas bóvedas, Vázquez explicó que esto obedece a una directriz del Ministerio de Salud, debido a que, cuando sucedió el terremoto de Limón, muchas bóvedas se abrieron dejando expuestos los cuerpos de los difuntos.
En Belén, también se enfrentó este problema con el terremoto de Cinchona, cuando 3 bóvedas se abrieron, lo que obligó a la administración a demolerlas. En estos casos, la única opción para los propietarios de sus derechos fue optar por nichos subterráneas.
Curiosidades del cementerio |
*Fuente: Entrevista a Lorena Vázquez, administradora del Cementerio |