Surgimiento de la Asociación de Vecinos de Barrio San Vicente y su impacto en el desarrollo comunitario
Una de las iniciativas que realiza la Asociación con jóvenes y adultos.
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Trabajan por construir un barrio más fuerte, inclusivo y próspero para todos.
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Uno de los proyectos más recientes es el de “Historia de San Vicente, con jóvenes y a colores”.
En Costa Rica existe una historia de más de un siglo en torno a la creación de organizaciones de índole comunitaria que se puede rastrear por lo menos hasta los inicios del siglo antepasado en distintos sectores de nuestro país, se trata de agrupaciones enfocadas en la mejora de la calidad de vida de los habitantes y bajo la idea de desarrollo para las comunidades; sin embargo, estas no se han visto libres de conflictos o dificultades.
Específicamente en el siglo pasado, en la década de 1920, se suscita el surgimiento de las Juntas Progresistas, estas mantenían un carácter más autónomo y su mayor impacto se dio entre las décadas de 1950 y 1960 al incidir en las problemáticas económicas y sociales de la época, sin embargo, su declive definitivo se dio en el años 80.
Más adelante, en 1967 se da la creación de la Dirección Nacional de Desarrollo de la Comunidad (DINADECO), a partir del cual se da un aumento de las Asociaciones de Desarrollo Comunal, las cuales fueron creadas desde sus comienzos por el propio Estado Costarricense pero siendo DINADECO su órgano rector. Muchas de las juntas progresistas ya debilitadas se fueron fusionando en estas asociaciones.
La Asociación de Vecinos de Barrio San Vicente, como se conoce hoy en día, es una entidad conformada más reciente. Sin embargo, esta organización es parte de una larga trayectoria histórica y de diversos procesos de transformaciones de las diversas organizaciones comunales.
Actualmente, el presidente de esta Asociación es William Arce González, en los demás puestos de la Junta Directiva también participan vecinos de esta localidad tales como Maynor Cruz Vega, Melba Calderón Aguilar, Rosibel Zumbado Núñez y Yesenia Quirós Fernández.
El señor Arce comenta que la función de la Asociación de Vecinos de Barrio San Vicente es la de “dedicarse a construir un barrio más fuerte, inclusivo y próspero para todos y todas, dónde se trabaje con pasión y compromiso para lograr un mejor futuro para la población de la comunidad”.
La Asociación, actualmente, cuenta con la participación de unas doscientas personas de diferentes edades en iniciativas como: clases de pintura para niños y adultos, cursos de bordado, clases de repostería, talleres de historia y muralismo para jóvenes y actividades de educación para la paz.
Uno de los proyectos más significativos que tiene es el de “Historia de San Vicente, con jóvenes y a colores”, el cual fue ganador de los Fondos Concursables de la Municipalidad de Belén como parte de las categorías tanto de la parte formativa, investigación como de producción artística.
Este proyecto consiste en rescatar la historia de Barrio San Vicente mediante un proceso creativo de indagación y comunicación donde jóvenes del mismo vecindario sean los protagonistas. Próximamente, con esta información se llevará a cabo un mural en el parque Manuel Emilio así como un libro que trate el trabajo en conjunto realizado en este proyecto. Se espera que se pueda finalizar el trabajo para diciembre del presente año.
Con respecto al futuro la Junta Directiva, esta aspira a ampliar el salón comunal e implementar varios cursos de idiomas, dándole así herramientas a la comunidad de San Vicente para optar por mejores oportunidades laborales a partir de destrezas necesarias hoy en día.
Don William comenta que lo que más lo ha motivado a él a ser partícipe de la Asociación como presidente “es poder ayudar a la comunidad dándoles herramientas para salir adelante, así como brindar espacios de cultura y educación”. Además, recuerda una situación que lo conmovió, cuando una niña que recibía clases de pintura en la Asociación se le acercó y le dio un abrazo en forma de agradecimiento por haber traído esta alternativa a su barrio, ya que si no fuera por el equipo de la Asociación, su madre no lo habría podido pagar.
Sin embargo, el presidente comenta que una de las mayores dificultades para la Asociación es la falta de recursos económicos para poder llevar a cabo las diversas actividades. Arce mencionó como agravante el tema de los límites territoriales entre Alajuela y Heredia que les ha perjudicado.
