Para las elecciones del 2022, ¿los belemitas votamos bien informados?
Alexander Porras Quesada*
A pocos meses de febrero de 2022, en donde las y los costarricenses elegiremos a las personas que ocuparán las curules legislativas y que desde ahí trabajarán por la búsqueda, en el mejor de los casos, de beneficios para toda la población nacional. Los belemitas tenemos la posibilidad de que una de esas curules sea ocupada por nuestro actual alcalde, quien abandonaría la silla de la alcaldía dejándonos a los pobladores del cantón una serie de asuntos pendientes y que quedarán como una brasa caliente para la administración municipal.
Veamos solo algunos de ellos:
- La contaminación de aguas negras a los ríos: Una causa penal por el delito de vertido de aguas negras a los ríos del cantón, por el caso concreto de Cariari. La Fiscalía Agrario Ambiental investiga ¿Quién fue la persona que autorizó en la Municipalidad arrojar aguas negras a los ríos Bermúdez y Virilla, y cómo fue que nadie en la administración detectó la anomalía de que se cobrará por más de diez años a los vecinos por un servicio que nunca recibieron y que hoy les trasladan la responsabilidad al solicitar que construyan tanques sépticos y drenaje? En el Barrio La Amistad, a finales del 2019 e inicio del 2020, se realizaron obras municipales sin estudios técnicos que luego no funcionaron, desperdiciando decenas de millones de colones y en donde se vierten aguas sin tratar al Río Quebrada Seca.
- Existe un posible acto delictivo a las finanzas públicas en torno al fracaso de los diseños constructivos del Edificio Municipal, según la auditoría interna. Es importante dar respuesta por los pagos anómalos que se realizaron a funcionarios contratados por servicios especiales y que entregaron planos defectuosos, desperdiciando 50 millones de colones, según el peritaje realizado por INDECA.
- ¿Quién asumirá la responsabilidad administrativa por los más de 122 millones de colones que se le tuvieron que pagar este año a Publicidad En Ruta Mil Ochocientos CRC S.A.?, propietarios de la Finca Los Sánchez.
- En 2006, Belén contaba con un Teatro Municipal, ubicado en el bosque El Nacimiento comprado con el objetivo de desarrollar en ese lugar un Centro Cívico Cultural. Han pasado 15 años y no hemos consolidado este centro y peor aún, ya NO tenemos teatro.
- Debilitamiento absoluto del control interno y la transparencia en la administración municipal. Del 2015 al 2020, de las 304 recomendaciones solamente se han atendido el 42%. Todo esto puede constatarse en el informe INF-AI-01-2021.
- ¿Dónde están los respaldos de los 14.000 millones que la auditoría externa señaló a la administración que no estaban disponibles y que motivó una ‘’abstención de opinión’’ por parte de los auditores contratados? A los belemitas nos seguirá inquietando los respaldos físicos que provocaron que los auditores externos prefirieron emitir su abstención de opinión, lo cual, en materia de auditorías, es de las afirmaciones más graves que se pueden hacer.
Estas son solo seis de las situaciones que deberíamos valorar como comunidad para determinar qué tan positiva es la gestión administrativa actual. Es importante rescatar la labor que realiza la fuerza laboral de la Municipalidad de Belén, que es honesta y se entrega, a pesar de que en muchas ocasiones son perjudicados por culpa de malas decisiones políticas a la cabeza del municipio y egos inflados.
De llegar a Cuesta de Moras, espero como habitante del cantón, una gestión honrosa por parte del actual alcalde de Belén, que en él impere el ejemplo de San Mateo (como él mismo recomienda), pero no en su faceta de recaudador de impuestos.
*El autor es vecino de San Antonio. Licenciado en Administración de Negocios.