diciembre 19, 2024
¿Se ha reflexionado lo suficiente sobre cuestiones como la disponibilidad de agua a futuro, la saturación vial y las incomodidades que enfrentan los vecinos? Foto: Bing Maps.

¿Se ha reflexionado lo suficiente sobre cuestiones como la disponibilidad de agua a futuro, la saturación vial y las incomodidades que enfrentan los vecinos? Foto: Bing Maps.

Para nadie es un secreto que Belén reúne una serie de condiciones que lo convierten en un lugar atractivo para la llegada de comercios, empresas, proyectos residenciales y muchas otras iniciativas.

Sin embargo, parte de ese atractivo radica en la percepción de que es un cantón ordenado y equilibrado. Últimamente, parece que ese equilibrio se está perdiendo, y el cantón está creciendo de manera descontrolada. Esto no significa que nos opongamos a la generación de empleos o a nuevos proyectos urbanísticos, pero es fundamental que dicho crecimiento mantenga un balance que considere aspectos básicos para una sana convivencia.

¿Se ha reflexionado lo suficiente sobre cuestiones como la disponibilidad de agua a futuro, la saturación vial y las incomodidades que enfrentan los vecinos? Por ejemplo, en un lote de La Ribera, pequeños movimientos de tierra ya provocan inundaciones en la calle al menos una vez por semana.

¿Ha intentado usted entrar o salir de Belén en horas pico? Las líneas de buses colapsan, los horarios se incumplen y las presas a las salidas de los grandes centros corporativos son interminables. Incluso, en horarios no pico, a veces el tránsito sigue siendo un caos.

Las alternativas viales que se han planteado como soluciones llevan más de 20 años discutiéndose, pero aún no generan resultados concretos. Arrastramos grandes deficiencias en el transporte público y, si usted recurre a plataformas de movilidad o taxis, es común que le rechacen el viaje o que se nieguen a llevarlo «porque Belén es un parqueo».

El crecimiento urbanístico debería estar acompañado de propuestas serias para mejorar la infraestructura vial y garantizar la seguridad. ¿Se han presentado estas propuestas a la comunidad? ¿Son viables? ¿Realmente resolverán los problemas existentes?

Además, muchos de los proyectos urbanísticos que proliferan en Belén parecen estar dirigidos a un segmento económico muy exclusivo. Por sus altos costos, no parecen pensados para los belemitas promedio. Muy pocos tienen la capacidad de pagar esas grandes sumas en dólares, pues la mayoría de estos desarrollos son de gama alta, no están pensados para el belemita de «a pie».

Atrás quedaron los años en los que existían soluciones de vivienda accesibles para una amplia mayoría, como lo fueron en su momento el Residencial Belén o el Barrio Horacio Murillo. Ahora, cada vez más personas comentan: «Qué lindo es Belén, pero no encuentro casa para mí ni para alquilar».

Este fenómeno podría marcar el inicio de un severo proceso de gentrificación, como ya ha ocurrido en otras zonas del país, donde los habitantes locales terminan desplazados porque no pueden desarrollarse ni costear vivir en su propio pueblo.

Es crucial que quienes evalúan y toman decisiones sobre estos proyectos sean minuciosos y eficaces al analizar sus implicaciones y proponer soluciones. El desarrollo debe ser equilibrado. De lo contrario, en unos años «nos va a doler la panza aunque ni tan siquiera hayamos comido», como dice un conocido refrán.

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