San Vicente es de Belén

San Vicente es de Belén. Y esto es algo que va más allá de lo legal, pues tiene un sustrato geográfico, histórico y cultural profundo:

San Vicente se encuentra inmerso en las mismas estructuras geológicas, hidrográficas y ecológicas que definen a Belén.
San Vicente es fundamental para la constitución histórica e identitaria de este cantón, sobre todo con Puente Mulas, el cual es uno de los puntos que contribuyó a la economía de sesteo que forjó las bases económicas de Belén e incluso le dio su nombre, y a la vocación peregrina en tanto la presencia de un tránsito de personas y animales que no solo dejaron estampas paisajísticas, sino también prácticas culturales.
San Vicente remite a la memoria histórica del Belén campesino, ya que ahí estuvieron Los Comunes y Potrerillos, terrenos y haciendas donde los abuelos y abuelas belemitas iban a trabajar para obtener su sustento.
San Vicente, es un barrio construido desde Belén, por la Asociación San Vicente de Paul adscrita a la parroquia de San Antonio. Las personas que conformaron esta asociación fueron connotados vecinos belemitas, que lograron obtener los terrenos y materiales para las primeras casas.
Las primeras familias de Barrio San Vicente son originarias de otros barrios de Belén, o de personas de otras partes del país que entre los 50-70 venían a Belén a trabajar en las fincas agrícolas y de ganado.
Todos los proyectos sociales de vivienda de San Vicente fueron gestionados desde Belén, con acompañamiento de asociaciones comunales belemitas como la Asociación de Desarrollo de San Antonio y la Municipalidad de Belén.
Los servicios básicos y la infraestructura comunitaria de San Vicente, como la cañería, el Parque de San Vicente, el Salón Comunal, la Ermita, entre otros, se concretaron en apoyo con organizaciones comunales belemitas y la Municipalidad de Belén.
Los grupos organizados de San Vicente han trabajado históricamente con los colectivos y asociaciones belemitas, forjando un vínculo profundo de apoyo recíproco y solidaridad.
San Vicente ha dado sus luchas por la vivienda, contra los botaderos, por el acceso y protección de los recursos, mano a mano con los demás vecinos de Belén.
San Vicente es un punto medular de la cultura hídrica belemita, un rasgo definitorio de la identidad del cantón, pues, ahí, fue un punto caliente de la relación cotidiana de Belén con los ecosistemas de agua dulce.
San Vicente es un punto de encuentro fundamental de los belemitas, precisamente por sus características hídricas. De ese modo, ahí, hay memorias, saberes, y prácticas compartidas que nos vinculan fuertemente.
La cultura de San Vicente es parte de la cultura belemita: turnos al Santo Patrón con las mismas comidas típicas, rezos del niño, tertulias en la esquina, leyendas en entornos hídricos, y sobre todos las andadas en los ríos y las nacientes.
El patrimonio arquitectónico presente en San Vicente como Puente Mulas y la Represa Hidroeléctrica emerge políticamente desde Belén, y los esfuerzos por su patrimonialización también han surgido desde Belén.
En San Vicente cuando se va al EBAIS, a la escuela, al colegio, al catecismo, al turno, a Raymi, al bar, al desfile de navidad, a los cursos de arte, a los equipos deportivos, se va a Belén.
San Vicente ejerce su derecho al voto en Belén y tienen peso en la elección de los representantes políticos de las diputaciones de Heredia y la Municipalidad de Belén.
Los personajes de San Vicente como Chico Morris y Óscar Ramírez llevaron a cabo una buena parte de sus logros con asociaciones y equipos belemitas. Además, son reconocidos como personas ejemplares en Belén, incluso finalistas de premios municipales.
San Vicente tiene sus amigos, familiares, vecinos en Belén.
San Vicente es reconocido y querido por los demás belemitas.
San Vicente piensa sus proyectos futuros con Belén, se proyecta siendo parte de Belén, y formando parte de las ideas que desarrollan actualmente en ese cantón.
San Vicente nunca ha querido ser parte otro cantón que no sea Belén, y siempre ha reclamado por una definición de límites que tome en cuenta su historia, su cultura, sus necesidades y sus perspectivas.

Este texto se fundamenta en la investigación hecha por el Colectivo Jóvenes y a Colores en el marco del proyecto “Historia de Barrio San Vicente: con jóvenes y a colores” financiado por el fondo concursable para el desarrollo artístico de la Municipalidad de Belén 2021.