Rafael Ángel Pérez Córdoba: el corredor con una gran sensibilidad social
Redacción El Guacho
Rafael Ángel Pérez Córdoba es un nombre que está enmarcado en la historia del atletismo de nuestro país. Sus tiempos en la pista no son fáciles de borrar, muestra de ello es su récord en los 10 mil metros planos, que después de 41 años ha sido imposible de superar.
Sin embargo, más allá del deportista que todos conocen, se considera un apasionado de la educación y, sobre todo, un costarricense de enorme sensibilidad social, la cual se forjó en sus tiempos de escolar a pie descalzo, en medio de la discriminación por ser hijo de madre soltera y en las penurias vividas en la pobreza de su infancia, metido entre cafetales de su Ciudad Colón natal.
“Experimenté mucho la vida dura del trabajo, me costó mucho subir en la vida, me costó conseguir empleo, viví momentos muy duros”, afirmó.
Relató que desde tiempos del colegio, gracias a sus profesores de Estudios Sociales, adquirió una visión crítica de la vida y una búsqueda de una posición emancipadora del ser humano.
“Hay que promover que cada persona sea autónoma, que sea libre, que se pueda expresar, que viva bien. La lucha por la equidad es fundamental, no es moral que en una sociedad haya gente que no tenga ni para comer, esa serie de inquietudes siempre las he tenido presentes, a mí me sigue sonando eso, que uno debe mantener una lucha”, confesó.
Hoy se muestra preocupado por la voracidad del consumismo infundido por el sistema capitalista; lo cual, según alertó, podría acabar con el mundo. A la vez, levanta la voz por la conservación del sistema de seguridad social y educación gratuita, dos de los motores que impulsaron la Costa Rica de nuestro tiempo.
“El capitalismo nos va a destruir. El enfoque consumista, agresivo contra el ambiente, va a destruir el mundo. Esto no puede seguir, tiene que haber una lucha para buscar una transformaciones del enfoque capitalista”, advirtió.
Este atleta y profesor universitario aseguró que nuestro país ha tenido una enorme influencia del marxismo, ideología que, dijo, no ha sido un fracaso.
“Millones de personas tienen influencia marxista y quizás no se han dado cuenta. Ese pensamiento es por el cual hemos tenido esos logros en el sentido de justicia social. En Costa Rica, la mayoría de aquellos principios del manifiesto comunista se pusieron en práctica”, confesó.
A pesar de su beligerancia en cuanto a ideologías, reveló que a lo largo de su vida ha tenido muy poca participación política; sin embargo, aclaró que su familia tiene legado calderonista.
Peréz, durante algunos años, fue afín a los socialcristianos, incluso ejerció como asesor de Marvin Herrera, Ex ministro de Educación en el Gobierno de Rafael Ángel Calderón Fournier, “siempre he sido muy atravesado, crítico e incómodo, y en política hay que acomodarse y yo no puedo”, relató.
Belemitas desiguales
Belén es el cantón donde este atleta encontró el amor en manos de su esposa, Luz Mary Zumbado, con quien contrajo nupcias en 1972 y engendraron una hija, Viviana, y dos retoños más: Rafael Ángel y Daniel.
Las calles de lastre de nuestra comunidad fueron durante aquellos años el lugar ideal para entrenar. Este atleta recordó que una de sus rutas de preparación abarcaba San Vicente, hasta llegar a la hidroeléctrica Ventanas, para luego salir por la finca de Marcial Aguiluz, pasar por la hondura y, finalmente, llegar a Puente Mulas.
De nuestro cantón, Rafael Ángel se muestra preocupado por las desigualdades, especialmente educativas, y por el ambiente, “solo el hecho de que un estudiante tenga tecnología y otros no, eso se vuelve discriminatorio”, lamentó.
“Belén tiene condiciones de vida interesantes, excepto en temas ambientales que me parece que, sobre todo con el tránsito, se ha vuelto complejo y es algo que se debe trabajar mucho. Además, hay zonas de Belén de gente que uno ve que debería meterse la mano en el campo de la educación, para lo cual se requieren políticas municipales”, afirmó.
“Dado ese desarrollo histórico del capitalismo por medio de las empresas, el nuestro es un cantón que lo podríamos imaginar casi desde un país desarrollado; sin embargo, podríamos ser mucho mejores. A pesar de que tenemos recursos, uno ve que se pueden hacer mejores cosas”, insistió.
Muchas de las reflexiones de este vecino de La Asunción se comparten en redes sociales, donde aprovecha para descargar contra la corrupción en el fútbol, en los partidos políticos y en cuanto aspecto sea necesario.
“Uno debe ser educador en todo momento y en todo lado, las redes sociales son un mecanismo de exponer su punto de vista, cuando uno logra meter una idea a alguien, una idea transformadora a alguien, esa persona cambia”, comentó.
Dos pasiones, educación y atletismo
La vida de nuestro distinguido belemita se divide en dos: la primera parte dedicada al atletismo, y el segunda a la educación. Al menos 40 años de su vida ejerció como profesor, se especializó en planificación curricular educativa y en investigación educativa, entre otros puntos destacados.
Actualmente, está pensionado por el Ministerio de Educación, pero sigue dando clases de doctorado en la Universidad La Salle.
“He sido más dedicado a la educación, sobre todo a buscar una educación más inclusiva, que permita un aprendizaje de calidad a todo el mundo y no a algunos nada más. El país tiene un defecto, tiene muchas ofertas, pero las buenas son para los ricos, para los pobres es la educación pública de baja calidad y eso no se vale”, lamentó.
La visión de Rafael Ángel es que la educación debe ser emancipadora, “cada niño o joven debe saber que la educación es para liberarse, para tomar conciencia, una educación concientizadora, pero eso es lo que no se hace”, advirtió.
“Hay que transformar al educador, el primero que debe liberarse es el educador y, lamentablemente, ahora lo están formando como un técnico, no tienen capacidad de tomar decisiones, hacen lo que dice el director o el supervisor, esto es un cambio profundo que hay que hacer”, informó.
Finalmente, dijo que la educación debería ser laica, “la religión es una ideología creada por los seres humanos, y es una ideología de dominación, impide al ser humano ser libre, indudablemente la educación no debería que tener nada que ver con la religión”.
“En ningún programa le dice al educador que rece en las mañanas y uno encuentra todas las mañanas a gente rezando”, concluyó.