Alcohólicos Anónimos de San Antonio se queda sin casa
Redacción El Guacho
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El grupo de alcohólicos anónimos de San Antonio se quedará sin casa a partir del 30 de setiembre. Ese día, tendrán que abandonar el local que por 37 años utilizaron en el Edificio Ángel Sancasimiro.
La decisión la tomó hace 3 meses el Consejo Económico Parroquial, al dar por finalizado el contrato que este grupo tenía con la Iglesia por el alquiler de un local a ¢50 mil mensuales.
Mucha bulla y vulgaridades durante las reuniones de Alcohólicos Anónimos, que afectaban a otros inquilinos y al grupo de la catequesis bautismal, fueron el detonante para que el Consejo iniciara el proceso de rescisión del contrato.
De acuerdo con el Padre Horacio Arias, cura párroco de San Antonio, dicha decisión se dio por incumplimiento de las cláusulas del contrato. “El problema se agudizó desde hace 3 años. En dos ocasiones, nos reunimos con representantes para evitar que esto nos genere problemas no directamente a nosotros, sino a los demás inquilinos. En su momento nos dijeron que iban a corregirlo pero nada pasó”, comentó.
“Ya se ha hablado, mandado cartas, se visitó. Se tuvo la tolerancia. Se tramitó todo por vía legal para llevar las cosas a derecho. Se les ha avisado con tiempo”, agregó.
Lo extraño
“A nosotros nos extraña que luego de todo el tiempo que hemos estado en el local, ahora nos digan que les incomoda si siempre hemos hablado duro”, se refirieron miembros del grupo de Alcohólicos Anónimos Estrella de Belén, que por políticas de la organización solicitaron guardar su identidad en el anonimato.
“Durante el desarrollo de las reuniones, no se habla solamente vulgaridades. Todas las terapias son distintas”, comentaron.
“En este momento, no queremos pelear, pero que no nos juzguen. Somos un grupo que ha salvado muchas vidas de las garras del alcoholismo y la drogadicción. Pagamos el alquiler porque todo grupo debe mantenerse, negándose a recibir contribuciones de afuera”, aseguran aludiendo a la Tradición 7 de la organización.
Recordaron que en su momento Monseñor Ángel Sancasimiro dijo que el local era única y exclusivamente para Alcohólicos Anónimos.
Sin embargo, nada de eso quedó escrito, y el mismo Sancasimiro, consultado por el Cura Párroco de San Antonio, admitió que eran convenios buscando el ayudar, pero no un compromiso.
Actualmente, el grupo de 20 integrantes permanentes gestionan reuniones con la curia de Alajuela, el Consejo Económico Parroquial, y la Municipalidad para encontrar una salida.
“Le pedimos a la comunidad que nos den ese apoyo. Recuerden que en cada uno de los hogares puede haber personas que ocupen del grupo. No cerremos las puertas a esa oportunidad de poder colaborar con ellos para salvar vidas. No estamos solo por puro vacilón”, finalizaron.