Alrededor de 20.066 belemitas están llamados a votar este domingo 4 de febrero

Alrededor de 20.066 belemitas están llamados a votar este domingo 4 de febrero 

• Históricamente, el abstencionismo ha sido el gran ganador

• Desconfianza en políticos, percepción de corrupción y descontento con el sistema desmotivan la participación electoral, aseguró politólogo

Este próximo domingo 4 de febrero del 2024 los belemitas tendrán la posibilidad de elegir a nuestras nuevas figuras de alcaldías, regidurías, sindicaturas y concejalías. 

Para las elecciones municipales se vota en 3 papeletas: la de color blanco para elegir Alcaldía, la de color celeste para elegir a las regidurías y la de color rosado para síndicaturas y concejalías. En el caso de Belén, para el Concejo Municipal se eligen 5 regidurías propietarias y 5 en suplencia. 

Según datos del Fichero Cantonal del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) , el padrón proyectado para nuestro cantón es de 20.066. 

Histórico de elecciones municipales 

Para las elecciones municipales del 2002 votaron 3.632 personas y el abstencionismo representó un 71%, para el 2006 un total de 4.626 belemitas ejercieron su derecho al sufragio lo que representó un 67,7%  de abstencionismo. 

En las elecciones municipales del 2010  votaron 5.869 belemitas y el porcentaje de abstencionismo fue de 63%. Para el 2016, las personas que acudieron a las urnas fueron 8.060 y el abstencionismo representó un 55%. 

En 2020, en las elecciones municipales se emitieron 8.217 votos, es decir, un 57% del padrón electoral no ejerció el sufragio. 

Campaña política y Abstencionismo 

El politólogo Alexander Chaverri Carvajal, Doctor en Ciencias Sociales de la Universidad de Sevilla y Máster en Servicios Públicos y Políticas Sociales de la Universidad de Salamanca, considera que: “Dentro de los principales factores para el alto abstencionismo se puede mencionar el desinterés y percepción limitada: muchos no se sienten conectados con la política local, considerando que las decisiones municipales tienen un impacto limitado en sus vidas.La falta de información, la carencia de datos sobre candidatos, propuestas y la importancia de elecciones municipales puede generar apatía”. 

Para Chaverri,  “la desconfianza en políticos, la percepción de corrupción y el descontento con el sistema desmotivan la participación electoral. Además, hay problemas logísticos, administrativos y  factores socioeconómicos que pueden aumentar el abstencionismo”. 

Con respecto a las campañas electorales: “Algunas son poco atractivas, no captan interés o no abordan temas locales. Hay poco enganche de los partidos con los requerimientos de las personas jóvenes, contribuyendo a la percepción de voto insignificante o desinterés. Hay falta de incentivos: la ausencia de motivación para votar, al pensar que no habrá cambios significativos, puede desmotivar la participación”, indicó.

Sobre las estrategias empleadas por los partidos políticos para atraer votantes  en las elecciones municipales, el experto considera que: “No es igual hablar de partidos en el poder y partidos de oposición. Los primeros suelen inaugurar obras, hacer anuncios, arreglar calles o aceras cerca de febrero. Los segundos intentan señalar irregularidades y poner la atención en otra parte. Es un juego de poder, donde solo uno puede ganar”.

“En síntesis, la dinámica municipal es heterogénea. No es lo mismo hablar de partidos nacionales, que de partidos regionales o cantonales”, agregó.

“Comúnmente, no hay líneas de comunicación homogéneas, y cada agrupación política se ajusta a su contexto o sus posibilidades dinerarias. En líneas gruesas, hay poca inversión en medios masivos. Algo similar ocurre con las redes sociales. Por otra parte, se está invirtiendo tiempo y recursos en volanteos casa por casa. Esto es efectivo, pero no masivo. Es poco probable hablar con todas las comunidades caminando. Bien harían equilibrando lo telemático y lo presencial”, destacó Chaverri. 

Otro de los aspectos a destacar es que Belén tiene buenos indicadores cantonales; sin embargo, el abstencionismo es alto. “Probablemente quienes se beneficien de esos buenos indicadores vivan en otra parte. Dicho de otra forma: probablemente los buenos indicadores en Belén no se traducen en concordancia, en bienestar para las personas belemitas. Habrá muchos que son inquilinos en su propio cantón. Un cantón con ingresos comparativamente altos, pero con amplias brechas de desigualdad. Entonces, ¿cómo le pedís a una persona que no llega a fin de mes que se interese en la política? Primero tiene que comer”, explicó Chaverri. 

“La suma es la operación aritmética de la democracia. Para plantear un proyecto alternativo de desarrollo no es posible hacerlo a solas. Hay que hacer coaliciones interpartidarias, con asociaciones comunales, culturales, con empresarios y trabajadores. No hay atajos. La ruta es siempre sumar”, finalizó.